¿Cómo mantenernos en movimiento, evitando el estancamiento espiritual?
A menudo, utilizo el dicho: «No sigas a un auto estacionado». Esta simple frase contiene una verdad profunda que se aplica no solo a las iglesias, sino también a la vida de cada creyente. ¿Alguna vez has sentido que te has quedado estancado en tu caminar con Dios? Es fácil caer en la rutina y dejar de avanzar, pero es esencial que mantengamos un crecimiento constante en nuestra fe. ¡No te pierdas este Blog!