Blog

Día 3: Dador alegre

Devocionales

Cada uno de como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.

Imagina que alguien viene a tu casa para ayudarte a pintar algunas habitaciones, pero queda claro que no quiere estar allí. Se queja todo el tiempo y no da una sonrisa ni una palabra amable. Claramente tiene un sentido de obligación y deber de estar allí, pero no hay amor, ni alegría, ni calidez en su presencia. ¿Quieres esa ayuda? ¡Seguro que no! Le dirías que por favor se quede en su casa.

Dios también tiene sentimientos. No quiere que nos entreguemos a él con una actitud reacia y a regañadientes. Si damos a fuerza, de mala gana, se arruina todo. Después de todo, Dios quiere nuestro corazón, no nuestro dinero.

Sin embargo, cuando damos a Dios alegremente, cuando tenemos una explosión de generosidad a Dios, cuando es tan divertido para nosotros, entonces esa es una historia diferente. A Dios le encanta ese tipo de generosidad. Después de todo, dar con alegría es evidencia de que amamos y confiamos en Dios. 

¿Por qué das alegremente? Porque lo amas, te deleitas en darle y confías en él. Sabes que él cuidará de ti y te proveerá, así que es un placer dar. Un dador alegre siempre revela un corazón que ama y confía en Dios, pero dar sin gozo revela un corazón lleno de religión y obligación.

Lectura Bíblica

"Cada uno debe dar según se lo haya propuesto en su corazón, y no debe dar con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama a quien da con alegría." 2 Corintios 9:7 RVC

Compartir

Acerca del Autor

Últimos Artículos

No hay más Artículos

Déjanos tu Comentario

Comentarios

  1. Buenos dias !!! Bendiciones a todos Feliz sábado
     Dios está trabajando en nosotros para hacer conformar nuestro carácter y que sea como el suyo. Dios es un dador. Se goza en bendecirnos ricamente. Ahora nos pide que hagamos lo mismo. El dar no es una tarea arbitraria para dar apoyo a las iglesias y ministerios. No, el dar forma parte de la transformación de nuestro carácter, para que sea más como el de Dios. Quizá es una de las maneras más profundas que tenemos para poner nuestra lealtad, dependencia y prioridades en la obra de Dios.

No te pierdas los otros artículos de nuestro

Blog