¿Hacia dónde se dirigen los Grupos Pequeños en tu iglesia?

Hace varios años, me encontraba en una conversación acerca de ministerio con nuevas generaciones en Inglaterra, junto a un panel de respetadas voces británicas. Describí varios enfoques distintos acerca del trabajo con preadolescentes y le pedí al panel que respondiera.

Recuerdo con mucha claridad que Pete Ward, una de las leyendas del ministerio juvenil en el Reino Unido, suspiró y dijo: «Solamente hay dos clases de ministerio: grupos de jóvenes hacia adentro y grupos de jóvenes hacia afuera». Lo que quiso decir fue simplemente que existen aquellos más interesados en discipulado y aquellos más apasionados por el evangelismo.

Recuerdo muy bien haber pensado -y aún lo creo-que hay mucha más complejidad y diferencias sutiles en los ministerios juveniles, sin embargo, las palabras de Pete se han quedado grabadas en mi mente todos estos años porque parecen resumir muy bien la amplia mayoría de grupos.

Cuando pensamos en grupos pequeños con preadolescentes, es importante saber por qué existen, por qué te molestas en tener estas reuniones. Puedes llegar a tu propia descripción o a una combinación de descripciones, pero quiero compartirte cuatro acercamientos a los grupos pequeños que he visto con más frecuencia. ¿Con cuál te identificas más? ¿Cuál representa mejor el enfoque que estás usando actualmente?

EDUCACIÓN

Tradicionalmente, el ministerio juvenil surgió del movimiento de la Escuela Dominical, que a menudo se convirtió en el departamento de educación cristiana de la iglesia. Ese nombre resume muy bien este acercamiento: los grupos pequeños con este enfoque se preocupan principalmente por educar a los preadolescentes en la fe cristiana.

Si no estás seguro si este es tu acercamiento o enfoque, considera el contenido y la forma. En otras palabras, si el contenido (o al menos lo que esperarías que fuera el contenido) se enfoca en transferir la verdad a los participantes, ayudarlos a crecer en su conocimiento, entonces este es probablemente tu acercamiento. Y si los tiempos de grupo pequeño están principalmente centrados en el maestro o enfocados en la información dada por el líder del grupo, este es un fuerte indicador de que tu grupo pequeño tiene este enfoque.

Esto no es malo. Sin embargo, puede terminar siendo muy parecido a la escuela y eso sería un bajón. El lado oscuro de este acercamiento es que tiende a enfocarse solamente en las mentes de los preadolescentes y en la información que pueden adquirir. Pero vivir como un seguidor de Jesús es una actividad que involucra al ser completo: mente, corazón, emoción, y conducta.

ESTUDIO BÍBLICO

Muy de cerca al previo, un enfoque en el estudio de la Biblia es mayormente educativo. Pero, en lugar de fundamentarse principalmente en la instrucción acerca de las creencias, este propósito está más interesado en ayudar a los preadolescentes a descubrir y entender las verdades bíblicas por medio de la lectura y el estudio de la Biblia.

Esto es lo grandioso de este acercamiento: la Biblia es el medio primario de la revelación de Dios para nosotros, y la mayoría de los jóvenes hoy no tiene la menor idea de que la Biblia, las verdades de la Escritura, e incluso sus historias nos hablan a nosotros. La lectura de la Biblia entre los cristianos va en retroceso. De hecho, dicen algunos investigadores que un 20 porciento de lectores bíblicos ha dejado de leer la Biblia en el período de duración de una generación. Otros es tudios afirman que solamente 1 de cada 5 asistentes a una iglesia dice recibir la ayuda necesaria para entender la Biblia.

Un grupo pequeño enfocado en el estudio bíblico tiene la oportunidad de revertir estas tendencias dañinas al ofrecer una interacción fervorosa con la Biblia. Este enfoque puede ser asombroso, particularmente cuando ayuda a los preadolescentes a relacionarse con las Escrituras. Sin embargo, lo que he visto es que la mayoría de grupos pequeños que dicen ser enfocados en el estudio de la Biblia son en realidad un modelo educativo con un maestro que distribuye información y existe muy poca interacción con las Escrituras de parte de los preadolescentes.

COMUNIDAD/TERAPÉUTICO

Este posiblemente sea el acercamiento o enfoque más común de los grupos pequeños en el ministerio juvenil. Lo que se espera es crear una auténtica comunidad, un lugar donde los participantes puedan ser honestos con las cosas que ocurren en sus vidas, incluyendo la integración de su fe a los asuntos de la vida cotidiana.

He agregado la palabra terapéutico a esta descripción no como algo negativo, sino como un indicador de que este tipo de grupos usualmente proveen un tiempo de «semiterapia» para el trauma que los preadolescentes experimentan.

Hay un gran valor en este acercamiento para los grupos pequeños. De hecho, probablemente es el propósito con el que mejor me alineo en mi propio estilo de liderazgo de mi grupo pequeño.

La precaución de este acercamiento es que muy fácilmente nos podemos volver perezosos y dejar que el tiempo de grupo se pase volando como la brisa. Sin intencionalidad enfocada, especialmente para abordar temas espirituales, el grupo podría terminar disfrutando del compañerismo, pero no lograr nada más que una noche divertida en la que se pasa tiempo juntos cada semana.

Vivir como un
seguidor de
Jesús es una
actividad que
involucra al
ser completo:
mente,
corazón,
emoción, y
conducta.

MINI GRUPO DE JÓVENES

La mayoría de grupos pequeños de los ministerios juveniles se enfoca en un propósito (como los que ya he descrito). Pero el acercamiento de mini grupo de jóvenes lanza la red más lejos. Este acercamiento mira al grupo pequeño como su propio ministerio juvenil, con el líder del grupo pequeño fungiendo como una especie de pastor juvenil.

Piensa en las funciones y en los propósitos del grupo de jóvenes. Podrías hacer una lista que incluya alabanza, enseñanza, evangelismo, discipulado, compañerismo, servicio, y más. Bien, el acercamiento de mini grupo de jóvenes abraza todo esto.

Este quizás sea el más inusual, pero vale la pena considerarlo. Piensa en el impacto que tendría el que tu grupo pequeño vaya en su propio viaje misionero. ¿O qué tal si la alabanza (que, por cierto, no es solo cantar) se convirtiera en parte regular de tu grupo pequeño? En cierto sentido, esta clase de grupo pequeño intenta dar vida a lo que significa ser la iglesia en el contexto de su grupo pequeño. Y esto, ¡puede ser sumamente poderoso!

Tomado con licencia de la revista LIDER 625, edición 17, Grupos pequeños: Que logran grandes resultados. Pag. 19-20.