“Una mujer, de las mujeres de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo, diciendo: Tu siervo mi marido ha muerto; y tú sabes que tu siervo era temeroso de Jehová; y ha venido el acreedor para tomarse dos hijos míos por siervos”. 2 Reyes 4.1
Además de ser un buen creyente, también se debe ser un buen administrador para no terminar padeciendo situaciones negativas nosotros y nuestra familia.
A pesar de que este varón era un hombre temeroso de Dios y que servía junto a Eliseo, terminó dejando a su familia en la ruina y, literalmente, hipotecado el futuro de dos de sus hijos.
Una mala administración trae consecuencias negativas para nosotros, para nuestros seres queridos y para el Reino de Dios al dar un mal testimonio.
Preguntas para reflexionar:
- ¿Qué habrán dicho sus hijos en su velatorio?
- ¿Qué habrán dicho los vecinos en el barrio?
- ¿Qué habrán dicho de Eliseo y su equipo de trabajo?
No subestimes la administración de la economía, porque esto traerá consecuencias muy negativas, no solo materialmente sino, también, a nivel familiar y espiritual.
Más preguntas…
- ¿Qué te gustaría que digan tus hijos en tu velatorio?
- ¿Qué te gustaría que digan tus vecinos en el barrio?
- ¿Qué te gustaría que digan de vos y de tu equipo?
Para obtener una respuesta positiva a estas preguntas, debemos administrar nuestros recursos con sabiduría, aplicando los principios de la Palabra de Dios.
No te olvides que el área económica, si bien no es la más importante, es central para el desarrollo de las demás áreas de nuestra vida.
Administrando correctamente facilitarás el desarrollo de las mismas, administrando erradamente lo entorpecerás.
Yo bendigo tu vida para que seas un buen creyente y también un excelente administrador, para poder bendecirte, bendecir a tu familia y ser de bendición en el Reino de Dios.
Tomado de “Principios para el Éxito” – Pr. Daniel González
Comentarios
Gloria a Dios , tomo está palabra y la voy a aplicar a mi matrimonio,mi familia, al ministerio y nuestros emprendimientos . Administrar con sabiduría, gracias Pastor Daniel Dios lo bendice