Iglesia Renacer
La Iglesia Renacer es Una Gran Familia en Cristo, que desde diciembre de 1988 está cumpliendo la misión de reconciliar a las personas con Dios y guiarlas en una relación creciente con Jesucristo.
Todo lo que hacemos, incluidos los artículos que publicamos y los cursos con enseñanzas que brindamos, son para cumplir ese fin.
Esperamos que puedas aprovechar todos estos recursos y compartirlos, para tu bien, el de tu familia y seres queridos. ¡Dios te bendiga!
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Comentarios
Hola hermanos! Bendiciones para todos.
De la lectura de hoy, rescato las discusiones de Jesús con los religiosos (maestros de la ley, fariseos y saduceos). Ellos venían a querer engañar al Señor, para que dijera algo incorrecto por lo cual lo pudieran arrestar. Pero unos tras otros se iban humillados y avergonzados por sus pecados y religiosidad.
En la confrontación entre sabiduría y conocimiento, siempre gana la sabiduría. Porque el conocimiento es humano, pero la sabiduría la da Dios.
Lo segundo que quiero rescatar son las “Señales antes del Fin“. Si las anotáramos en un papel, y las fuésemos tildando, llegaríamos a la conclusión de que ya están todas cumplidas. El regreso de Cristo es inminente. De ahí la importancia de que estemos preparados, y que sigamos predicando el Evangelio mientras todavía haya tiempo.
Más allá del orden de los acontecimientos, qué parte del discurso de Jesús está dirigida a la nación de Israel, cuál otra es para la Iglesia, y cuál finalmente para los gentiles. El versículo más importante que quiero resaltar es este:
Mateo 24:35 (RVC)
“El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán.”
Amén! Gloria a Dios. Aleluya!!!
A partir del capítulo 21 hasta parte del 28 todo transcurre en una semana aproximadamente. Llega Jesús a Jerusalén, sabe que esta a punto de ser arrestado y crucificado (sus anuncios de su muerte en capítulos anteriores).
Esta preparado para eso. Esa es Su misión. Para morir nació. Y luego resucitar ( también predicho por él).
Es el fin del ministerio de Jesús. Y aprovecha para decir sus últimas palabras a sus discípulos y también a los dirigentes religiosos de Israel. Las parábolas mencionadas aquí van dirigidas a ellos. Y también la reprensión en el cap.23.
Buenas Tardes !!!!! Bendiciones a todos !!!!! tanta cosas rescatariamos de os 4 capitulos de hoy , yo me quedo con Mateo cap 22.37-40
Amarás a tu prójimo
Podemos ver en Mateo 22:37-40 que se le pidió a Jesús que identificara el mayor mandamiento, a lo que Él respondió: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas».
Muchos de nosotros sabemos que estos son los dos grandes mandamientos, pero no tenemos ni idea sobre cómo demostrar este amor. En ocasiones se nos hace mucho más fácil tratar de expresarle nuestro amor a un Dios intangible, que expresárselo a las personas con quienes interactuamos a diario. Tal vez se deba a que nos sentimos temerosos de que nuestra expresión de amor sea rechazada. Tal vez esperemos reciprocidad o que nuestro «prójimo» nos demuestre amor primero. Si ese es el caso, puede que tengamos que esperar largo tiempo.
¿Dónde nos encontraríamos hoy si Jesús hubiera escogido reservar el mayor acto de amor –el sacrificio de Su propia vida– hasta que alguien le demostrara que Lo amaba o aceptaba primero? O, ¿qué si ese regalo de salvación hubiera dependido de nuestro reconocimiento y amor hacia el Dios Todopoderoso? Piense por un momento, ninguno de nosotros sería salvo.
No, por el contrario, lo que Dios requiere de nosotros es que amemos a nuestro prójimo no sólo cuando sea bueno con nosotros o sea fácil de amar. Debemos amarlo por completo, de la misma manera en que Cristo nos ama.
Hola, hermanos. Es tan lindo leer.y volver a leer la vida del Señor en Su corta estancia sobre la Tierra. Tan lleno de amor hacia los rotos, los necesitados, los que nada podemos ofrecerle a cambio de ello. Ese humanarse ante cada situación para, luego, darnos aliento. Y casi siempre con un: “Tus pecados son perdonados”, escandalizando a quienes no necesitan perdón. Glorioso Jesús, que me llena de confianza