Pr. Daniel González
“Y nadie echa vino nuevo en odres viejos; de otra manera, el vino nuevo rompe los odres, y el vino se derrama, y los odres se pierden; pero el vino nuevo en odres nuevos se ha de echar”. Marcos 2.22
Para crecer y entrar en etapas nuevas debemos estar preparados, ya que muchas crisis se producen, no por lo nuevo, sino por la falta de preparación para recibirlo.
El vino nuevo:
- En lo emocional, estar preparados para comenzar una relación sentimental.
- En lo familiar, estar preparados para recibir a los hijos.
- En lo económico, estar preparados para administrar mayores recursos.
- En lo profesional, estar preparados para responsabilidades mayores.
Este vino requerirá de un odre nuevo para que pueda ser aprovechado y, además, para que no rompa el odre viejo.
El odre nuevo:
- Sanidad emocional y amplitud para compartir.
- Matrimonio bien consolidado.
- Dominio propio y establecimiento de prioridades.
- Disciplina en la organización y excelencia en la ejecución.
Este odre debe ser preparado antes de que llegue el vino nuevo, para alejar toda crisis de tu vida y no entrar en conflicto a causa de las bendiciones.
Necesitamos entender que el odre de hoy sirvió para el vino actual, y que el vino nuevo requerirá de un odre nuevo.
Yo bendigo tu vida con preparación para recibir lo nuevo de Dios, y que esto sea para bendición y no haya crisis por falta de preparación.
Tomado de “Principios para el Éxito” – Pr. Daniel González
Comentarios
Señor ayúdanos a ser esos odres nuevos, para recibir el vino nuevo que viene de Ti. Que nuestra falta de preparación y planificación no sea un impedimento para tu crecimiento. Todo lo contrario, que podamos ver lo que quieres hacer, y prepararnos para ser usados para que se haga realidad. Amén!