“Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” (Romanos 5:3-5).
Tribulaciones = Paciencia = Prueba = Esperanza. Según la Palabra de Dios existe una fórmula que nos lleva a la bendición. El Apóstol habla de gloriarnos en los problemas. ¿Será esto realidad o una utopía? En este versículo hay una clave: la palabra “sabiendo”. Es decir, atravesar situaciones dolorosas, problemáticas, complicadas que nos tocan enfrentar será la manera de alcanzar la tan preciada paciencia. ¿Conoces a alguien sumamente paciente que nada lo altera, nada lo saca de su eje, que ha aprendido a esperar sin enojarse, sin reclamar, sin frustrarse?
Muchas personas a diario, tienen expresiones como esta: “¡Dios, dame paciencia!”. Pero no comprenden que no se trata de una pócima mágica que cae en nosotros cuando la pedimos; tampoco se trata de un temperamento; sino que, luego de haber atravesado tribulaciones, aprendemos a ser tolerantes en la vida. No olvidemos, además, como dice la Escritura, que esa paciencia será probada, y el resultado será la esperanza en nosotros. Todo esto lo hace uno, y ese es el Espíritu Santo que habita en nuestro corazón.
Desafío de hoy: Revisa tu nivel de tolerancia. ¿Eres paciente con los que te rodean o la impaciencia te gana? Pide al Espíritu Santo que Su amor te abrace y te transforme.
- 1 Samuel 4:1-22 | (Leer)
- 1 Samuel 5:1-12 | (Leer)
- Romanos 5:1-21 | (Leer)
Comentarios
Desafío de hoy: Revisa tu nivel de tolerancia. ¿Eres paciente con los que te rodean o la impaciencia te gana? Pide al Espíritu Santo que Su amor te abrace y te transforme.EL SEÑOR y yo estamos trabajando en esto!
GRACIAS SEÑOR por tu PODER, GRAN AMOR!??