“Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que tú formaste, digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, y el hijo del hombre, para que lo visites?” (Salmo 8:3-4).
Existen personas que lamentablemente tienen una pésima memoria: no recuerdan dónde dejan las cosas, se olvidan de todo, no pueden recordar ni siquiera los nombres de sus hijos, pierden el celular con frecuencia, viven haciendo llaves nuevas para reponer las perdidas. Pero hay otras que, por el contrario, tienen una mente prodigiosa y recuerdan todo: fechas, nombres, caras, eventos, son realmente admirables.
Así y todo no pueden superar lo que es nuestro Dios, quien dice la Biblia no se olvida del hombre. A pesar de que el espacio es inmenso, el cosmos que se muestra infinito, el mundo que es gigante, no obstante Dios no olvida de nada. No solo no se olvida, sino que aun ni un cabello cae a tierra sin que Él lo tenga en cuenta. Tiene todos nuestros cabellos contados. A pesar de esto, algunos piensan que Dios se olvidó de ellos o que los abandonó. Ese pensamiento, por supuesto, no viene de Dios, sino del enemigo que desea que te alejes de Él.
Desafío del día: Si estabas pensando de esta manera, haz un alto y vuélvete a Dios. Él no se ha olvidado de ti y de cada promesa que te ha hecho. Corre a Sus brazos que siguen abiertos, y volvé a experimentar Su amor.
- 2 Samuel 3:1-39 | (Leer)
- 2 Samuel 4:1-12 | (Leer)
- Salmos 7:1-17 | (Leer)
- Salmos 8:1-9 | (Leer)
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Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que tú formaste, digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria, y el hijo del hombre, para que lo visites?” (Salmo 8:3-4).
Contemplemos su BELLEZA!