“Pero yo cantaré de tu poder, y alabaré de mañana tu misericordia; porque has sido mi amparo y refugio en el día de mi angustia. Fortaleza mía, a ti cantaré; porque eres, oh Dios, mi refugio, el Dios de mi misericordia” (Salmo 59:16-17).
La Palabra de Dios afirma que no hay prueba mayor de lo que podamos soportar. Cuando sientas que ya no puedes más, que es demasiado lo que te está tocando vivir, declara esta palabra con fe. En este Salmo David clama a Dios para ser librado de los enemigos que lo rodeaban. Pero termina diciendo: “Pero yo cantaré de tu poder, de mañana te alabaré”.
Mientras muchos deciden quejarse, renegar o negar la fe en medio de la noche, David decide alabar. Es que cuando la noche se pone más oscura, es el momento más cercano a que el sol vuelva a aparecer. Y este acontecimiento nos ayuda a entender la vida misma. Cuanto más oscuro esté tu panorama, confía, porque más cercano está el amanecer. Recuerda que Jesús es nuestro sol de justicia. En Él tenemos salvación.
Desafío de hoy: Si estás atravesando momentos de angustia, si la noche se ha puesto demasiado oscura y pareciera que no encuentras el camino, aun si te sientes perseguido por la conducta de alguna persona, te animo a que eleves la mejor adoración al Único Dios, reconociendo Sus atributos y dando gracias por Su protección. Bendice a aquellos que te persiguen, ¡reconoce a Dios como tu fortaleza, amparo y refugio!
- 2 Reyes 11:1-21 | (Leer)
- 2 Reyes 12:1-21 | (Leer)
- Salmos 59:1-17 | (Leer)
- Salmos 60:1-12 | (Leer)
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