Día 241: “El poder de la cruz”

“Así que, hermanos, cuando fui a vosotros para anunciaros el testimonio de Dios, no fui con excelencia de palabras o de sabiduría. Pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a este crucificado” ( 1 Corintios 2:1-2). La cruz era el elemento de tortura más utilizado en la antigüedad. Esta se usaba para dar muerte a aquellas personas que habían infringido la ley. Los asesinos y los ladrones pagaban un precio muy alto por sus delitos, eran crucificados de una manera horrenda; el condenado, después de unas horas de estar colgado en el madero, terminaba asfixiado. Ahora bien, la paga del pecado es la muerte; nosotros estábamos condenados en nuestros delitos y transgresiones, todos somos pecadores y todos necesitamos un Salvador. Por este motivo fue enviado Jesús a morir en una cruz, para darnos libertad y perdonar nuestras transgresiones. Pablo, por otra parte, va a recordar el poder de la cruz. El Evangelio está incompleto si la sacamos de él. Jesús nos dio la prueba más grande de amor al morir voluntariamente en ella. Hay poder en la cruz de Cristo, esta es la fuente de nuestra victoria, allí fueron clavados todos nuestros pecados. Ya no hay condenación sino el perdón eterno. Desafío: Te propongo que hoy ores a Dios pidiéndole que te revele plenamente la cruz para que así puedas descubrir el verdadero poder que en ella hay, y por medio de esta experiencia tengas una victoria total en todas las áreas de tu vida.

• Isaias 2:1-22 | (Leer)
• Isaias 3:1-26 | (Leer)
• 1 Corintios 2:1-16 | (Leer)