Día 338: “Andar como Él anduvo”

“Pero el que guarda su palabra, en este verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo” ( 1 Juan 2:5-6). Juan afirma en su epístola que, si decimos conocer a Dios debemos guardar Sus mandamientos y así ser perfeccionados en Su amor. Debemos andar como Él anduvo. ¿Será fácil amar? Indudablemente no, cuando me dejo llevar únicamente por mis emociones y sentimientos. Amar es una decisión, yo decido permanecer en amor. Es por eso que el apóstol Juan dedica esta parte de la palabra para hablar de tan importante mandamiento. A menudo lastimamos a otros y somos lastimados, y esas heridas del corazón nos llenan de bronca, de rencor, y son el principal impedimento para amar al prójimo. En algún momento quizá nos preguntamos: “¿Cómo salgo de la trampa que no me permite amar?” Y la respuesta la encontramos en Dios, cuando decidimos abandonar toda herida y permitir que Su amor nos abrace para poder amar a las demás personas. Muchas veces decimos “yo amo a Dios”, pero en el momento que nos lastiman o que viene a memoria alguna vieja herida no solucionada, nos damos cuenta de que nuestras acciones no están de acuerdo con nuestras palabras. Qué bueno en este día es poder pedirle a Dios que examine nuestro corazón y hacernos la siguiente pregunta: “¿Habrá alguna herida que aún no he entregado?” Desafío: Ríndelo todo delante del Señor. Deja que el amor de Dios se perfeccione en ti, anda como Jesús anduvo.

  • Oseas 13:1-16 | (Leer)
  • Oseas 14:1-9 | (Leer)
  • 1 Juan 2:1-29 | (Leer)

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  1. Pero el que guarda su palabra, en este verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo” ( 1 Juan 2:5-6). Juan afirma en su epístola que, si decimos conocer a Dios debemos guardar Sus mandamientos y así ser perfeccionados en Su amor. Debemos andar como Él anduvo. ¿Será fácil amar? Indudablemente no, cuando me dejo llevar únicamente por mis emociones y sentimientos.

    Amar es negarse asimismo es seguirlo, es una decisión, un entrenamiento!
    ” Ya no vivo yo, más “CRISTO VIVE EN MI”
    GRACIAS SEÑOR!
    Me redarguyes de pecado, me liberas de mi misma!
    Nunca me has abandonado.
    Durante la noche me alimentas, diriges mis pasos, das luz a mi vida!
    Eres hermoso, el más bello, de los hombres, moriste por mi, ahora vivo para ti!
    ALELUYA! A TU NOMBRE GLORIA!

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