“Entonces, vuelto el Señor, miró a Pedro; y Pedro se acordó de la palabra del Señor, que le había dicho: Antes que el gallo cante, me negarás tres veces” (Lucas 22:61).
Qué momento tan difícil habrá sido para el Señor ver con Sus propios ojos que Su discípulo más fiel y leal, en el momento de la prueba, mientras lo estaban maltratando, lo negaba en tres oportunidades. Jesús le había predicho, le había anunciado que antes que el gallo cantara lo negaría, y así fue. Me pregunto: ¿Qué le habrá causado más dolor?, ¿los maltratos físicos o la traición de su querido amigo Pedro?
Nos tocará atravesar momentos en los que seremos probados si nos jugamos por el Señor o lo negamos. Con nuestros silencios o con nuestras actitudes podemos caer en la misma circunstancia que hace dos mil años vivió Pedro. Hay situaciones cotidianas que no te tienen que importar, como las burlas, el rechazo, el saber decir que no o darte media vuelta y salir de ciertos lugares donde no se está honrando a Jesús.
Jesús se jugó por nosotros al morir en una cruz, salvarnos y rescatarnos de nuestra vana manera de vivir; ahora nosotros debemos, con valor, jugarnos por Él. No lo niegues, habla con coraje de Su amor y Su poder.
Desafío: Pensemos en las oportunidades en que lo hemos negado, teniendo la posibilidad de hablar del Señor. Hoy mismo seguramente volveremos a ser probados ¿Qué haremos? No te avergüences, habla con valor.
- Números 11:1-35 | (Leer)
- Números 12:1-16 | (Leer)
- Lucas 22:1-71 | (Leer)
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