“Piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, y que hacía muchas limosnas al pueblo, y oraba a Dios siempre.
Este vio claramente en una visión, como a la hora novena del día, que un ángel de Dios entraba donde él estaba, y le decía: Cornelio” (Hechos 10:2-3).
Dios revela Sus visiones y maravillas a hombres y mujeres con corazones piadosos y temerosos de Él, que buscan agradarle en todos sus caminos, que oran a Dios siempre y que son generosos. Cornelio tenía un oficio difícil, ya que era un centurión de una compañía llamada La italiana. Los centuriones eran soldados con un grado militar y tenían a su cargo una centuria, quiere decir unos cien soldados. Aun en este oficio muestra su amor y temor a Dios.
Pienso que no hay oficio o trabajo en la actualidad donde sea fácil jugarse por Dios, todos tienen su grado de dificultad en medio de mundo lleno de corrupción. Cornelio era temeroso del Señor, y había desarrollado hábitos saludables para su vida espiritual que rápidamente llamaron la atención de Dios. Por eso es que envió un ángel para llevarlo a un nivel superior. En este pasaje, podemos observar cómo el Señor conoce y resalta la actitud de Sus hijos; nada podemos esconderle. No importa el pasado que hemos tenido, somos nuevas criaturas y somos limpios y santos para Él.
Desafío de hoy: Toma la decisión de tener actitudes que agraden a tu creador. No te dejes llevar por agentes contaminantes en tu trabajo, manténete fiel a Dios y levanta sus valores donde quiera que estés.
- Josué 7:1-26 | (Leer)
- Josué 8:1-35 | (Leer)
- Hechos 10:1-48 | (Leer)
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