2. Lección Grupos de Vida

INTRODUCCIÓN

Jesús es la persona más importante en la historia de la humanidad, su influencia ha sido tal que ha logrado dividir el mundo en antes de Él y después de Él. Su mayor alcance ha sido para quienes lo hemos aceptado como nuestro Señor, Salvador e Hijo de Dios. Jesús ha cambiado la vida de millones de personas en la historia; es el camino al Padre y todos los que le reciben pueden heredar la vida eterna con Él. Conocer a Jesús implica aceptar una necesidad que solamente Él puede saciar.

PREGUNTAS PARA COMPARTIR

1. ¿Cómo responderías a la pregunta sobre, quién es Jesús?
2. Lee 2 Corintios 5:17… ¿Qué significado tiene para tu vida estar en Cristo?
3. Testimonio corto. ¿De qué manera el conocimiento de Jesús ha moldeado tu carácter?
4. Lee Juan 3.16-17… ¿Cómo expresarías estos dos versículos en tu vida?
5. Hablando con un incrédulo… ¿Qué argumentos usarías para enseñarle que Jesús es real y es el camino a la Salvación?
6. ¿Qué harás a partir de esta semana para aprender más sobre Jesús? ¿Cómo te podemos ayudar como grupo?

AVANZANDO

Decir: ¡Conozco a Jesús! Implica poder presentarlo. Si alguien ha sido transformado por Él, puede hablar de como su vida cambió a causa de conocerle. Si alguno ha recibido un milagro cualquiera que sea, puede expresarle a otros sobre como Jesús cambió su vida. Jesús no solo vino a Salvar al mundo, vino a cambiar tu vida. El crecimiento en el conocer a Jesús implica: Moldear tu carácter y afirmar tu identidad; hacerte una persona de fe; influir en tu vida diaria; enseñarte el camino a la eternidad.

CAMBIANDO TU MENTE

“El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ese es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él” Juan 14.21

ORACIÓN

Señor ayúdanos a crecer en tu conocimiento. Te pedimos que abras nuestra mente a tu sabiduría. Queremos ser hijos que te representen en cualquier momento y no callar cuando alguien tiene dudas sobre ti. Hoy queremos guardar tus mandamientos y amar a nuestro prójimo de corazón. Manifiéstate es nosotros Dios. Gracias por estar siempre atento a transformar nuestro carácter y hacer de nosotros una mejor persona. Jesús, gracias por afirmar mi identidad de hijo y consolidarme en la fe. Enséñame cada día a parecerme más a ti. ¡Amén!