Jesús es el Cordero de Dios quien quitó el pecado del mundo; eso creen los cristianos. Deberías considerarlo como una gran noticia para ti. ¿Por qué? Porque ya no tienes que ganarte el perdón; ya has sido perdonado.
El pecado que has tratado de compensar ya ha sido pagado y redimido. Ocurrió hace dos mil años, cuando el Cordero de Dios quitó el pecado del mundo. El pecado de todo el mundo. Todo pecado, incluyendo el tuyo.
Unos 20 años después de la crucifixión de Jesús, el apóstol Pablo describió el significado de ese trágico y glorioso evento de la siguiente manera:
“Al perdonarnos todos los pecados y anular la deuda que teníamos pendiente por los requisitos de la ley. Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz.” Colosenses 2:13-14
Por medio de Cristo, Dios ha cancelado tu deuda de pecado. Al depositar tu fe en Cristo, tu pecado es perdonado. Tu deuda es cancelada. No le debes a Dios y no estás en deuda contigo mismo. Mientras otros sistemas de fe requieren que te ganes el perdón, Pablo propone que ya está ganado. Dios hizo lo que tú no podías hacer. Jesús tomó tu pecado y se lo llevó. Dios ha puesto el regalo del perdón a disposición de todos. Como todo regalo, es tu decisión aceptarlo o rechazarlo.
Toda religión ofrece una respuesta a la pregunta de qué debemos hacer cuando no podemos perdonarnos a nosotros mismos. Pero sólo una persona en la historia se ofreció a sí mismo como respuesta a esa pregunta.
PREGUNTAS
- Según esta sección, ¿qué requieres hacer para recibir el regalo del perdón de Dios?
- ¿Cómo te sientes al saber que tu pecado ya ha sido pagado?
- ¿Qué te impide aceptar el perdón de Dios por medio de Cristo?
