Milagros en cuarentena

“Oh Señor, he oído tu fama; he considerado tu obra, oh Señor. ¡Avívala en medio de los tiempos; en medio de los tiempos hazla conocer! En medio de la ira acuérdate de tener misericordia.” Habacuc 3:2

Lo que el Señor está haciendo en estos tiempos es asombroso. Por todos lados escucho de Su obrar. Me llegan testimonios hermosos, que son una “caricia al alma”, y me emociono hasta las lágrimas porque extraño y anhelo verlos a todos. Pero entiendo que este es un tiempo especial para la Iglesia de Cristo en todo el mundo. Una ventana única de oportunidad para prepararnos espiritualmente para la gran cosecha que está viniendo. 

Te contaba que recibo testimonios, y me dije a mí misma: “Esto no es para mí sola. Lo debo compartir.” Me siento en la obligación de dar a conocer estas experiencias para ayudarte en tu fe y renovar así las esperanzas en quien hemos creído. En medio de tanta locura global, Dios se acuerda de su pueblo mostrando misericordia y amor. Con gozo, estoy viendo crecer y madurar por los medios digitales, a mujeres y hombres en los Grupos de Vida. Es Dios avivando a su Iglesia.

De las ricas experiencias que viven hermosas mujeres es de lo que quiero compartirte hoy. En tiempos de pandemia la conexión vía grupos de  Whatsapp o Zoom ha redundado en crecimiento espiritual y apoyo unas a otras en oración. Se sienten contenidas, acompañadas y edificadas por las líderes. 

Grupos de Vida

Laura nos cuenta que el grupo ha sido de enorme bendición, que le ha permitido crecer en el Señor al compartir la Palabra y desarrollar relaciones de amistad. También donde aprende a descubrir y usar sus dones y talentos. En el grupo puede intercambiar pensamientos, aclarar dudas, orar las unas por las otras y estar en un mismo espíritu. Semana tras semana se reportan nuevas vidas salvadas, milagros de sanidad, restauración de matrimonios y provisión económica.

Algunas líderes están usando Zoom como herramienta para evangelizar y así seguir cumpliendo con la Gran Comisión. También por esta vía se realizan ministración de sanidad interior y liberación. Las células reportan crecimiento y multiplicación. El acompañamiento emocional y espiritual que reciben a través de los grupos es lo que más se agradece en estos tiempos en que muchas están completamente solas. 

Silvia nos dice que coparticipan permanentemente en el crecimiento en la Palabra y apoyo mutuo. Comenta que el grupo no trabaja un día a la semana sino todos los días, a la hora que sea. Cuando alguien lo necesita, están de oración en oración. 

Nuestros hermanos han encontrado trabajo, cambiado el auto, comenzaron a construir. 

Nuevos Nacimientos

Sandra nos cuenta que recibió a Jesús en su corazón hace unos dias. Comenzó a orar por su familia y matrimonio, que no estaba bien. Ahora su casa cambió. Hay paz y armonía, y con su marido están mejor. Se dio cuenta que Dios empezó a obrar en su vida. Cuenta que está feliz y quiere conocer cada día mas a Dios a través de las enseñanzas que recibe.

Paola, una mamá sola, conoció a Jesús en un Grupo de Vida. Dice que llegó a la Iglesia Renacer hace tres meses. ¡Sí, ahora! En el formato de iglesia digital. Ella junto a sus tres pequeñas hijas vienen de un mundo de violencia y abusos, y cada día aprende sobre el amor divino del Señor. Está saliendo adelante gracias a la ayuda de los hermanos, y ahora ella alienta a otras al decir que con la mano de Dios todo es posible. ¡Qué increíble! ¡Gloria a Dios!

Buenas Obras

Las buenas obras se han multiplicado por doquier. Atendiendo necesidades, como la entrega de alimentos y abrigo. Y tal es así que en el grupo de nuestra hermana Mirta comenzaron a tejer cuadrados para armar colchas para el hogar Sierra Dorada. Esto trajo un contagio en otras, que no dejan de tejer y sumar a las donaciones.

Continuará…

Esto y mucho más tengo para contar. Yo misma estoy feliz, sorprendida y agradecida a Dios y al Espíritu Santo por lo que está haciendo en la vida de muchas personas.

No estamos encerrados. ¡Estamos libres! La Palabra de Dios no está presa. Te animo a salir de tu zona de confort, a no ser escaso y a extender tus límites. Te bendigo y abrazo.