Blog

Día 212: “Ser agradecidos”

“No quisieron oír, ni se acordaron de tus maravillas que habías hecho con ellos; antes endurecieron su cerviz, y en su rebelión pensaron poner caudillo para volverse a su servidumbre. Pero tú eres Dios que perdonas, clemente y piadoso, tardo para la ira, y grande en misericordia, porque no los abandonaste” (Nehemías 9:17). ¡Cuán doloroso habrá sido para Dios! Sus hijos no quisieron oír, fueron ingratos, se endurecieron y fueron rebeldes. Comencemos de a poco… ¡Qué actitud negativa es la ingratitud! Esto mismo puede suceder en un matrimonio, en una familia, cuando nos vamos acostumbrando a que el otro debe hacer ciertas cosas en el hogar y ya no somos agradecidos ni valoramos su trabajo… Qué difícil es mantener una actitud de valoración a pesar del paso del tiempo. Definitivamente, el pueblo de Dios tiende a caer en esta clase de conducta. Cuando no nos acordamos de lo bueno, fiel y maravilloso que fue Dios en cada etapa de nuestras vida, corremos el riesgo de proceder de la misma manera que el pueblo en aquella oportunidad. Y la consecuencia es, probablemente, que nos endurecemos. La Biblia afirma que, aunque padre y madre nos dejaran, Dios no nos abandonará. ¿Somos agradecidos por su compañía? Aun así, aunque esto no suceda, dice la Palabra que Dios perdona, es clemente, piadoso, tardo en airarse, porque es misericordioso, y no nos abandona. ¡Qué gran diferencia entre Dios y el hombre! Desafío: Te animo a que en este día puedas evaluar cómo es tu comportamiento: ¿Semejante al de Dios o al del pueblo en épocas de Nehemías? ¿Eres agradecido con Dios, con tu familia, con los que te aman?

  • Nehemías 9:1-38 | (Leer)
  • Nehemías 10:1-39 | (Leer)
  • Salmos 147:1-20 | (Leer)
  • Salmos 148:1-14 | (Leer)

Compartir

Otras Publicaciones

Envíanos un Mensaje

Acerca del Autor

Últimos Artículos

No hay más Artículos

Déjanos tu Comentario

Comentarios

No te pierdas los otros artículos de nuestro

Blog