En esta última sección del capítulo, procuraremos poner en práctica la Práctica Efectiva de Liderazgo estudiada, dentro del contexto de la iglesia Renacer y el Grupo, Red o Ministerio en el cual estés liderando.
- Nuestra Visión es ser “Una Gran Familia en Cristo”.
- Nuestra Misión es “Reconciliar a las personas con Dios, y guiarlas en una relación creciente con Jesucristo”.
- Estas declaraciones no cambian, porque definen lo que somos y a lo que nos dedicamos como Iglesia local.
- La Estrategia que hemos elegido para hacer realidad nuestra Visión y Misión, y de esa manera transformar las vidas de personas sin Cristo en Discípulos del Señor, que se reproduzcan también en otros Discípulos, la definimos con estas 4 acciones:
- Ganar
- Consolidar
- Discipular
- Enviar
- Si lo hacemos bien, lograremos finalmente alcanzar el propósito de la Multiplicación, que en última instancia nos dará el crecimiento que buscamos, para que la obra de Dios se extienda y cumplamos así la Gran Comisión que nuestro Señor nos ha encomendado.
- Por eso cada año necesitamos definir nuevos Objetivos, que direccionen nuestras acciones, y que nos ayuden a medir nuestros avances. Los Objetivos deberían responder a las preguntas:
- ¿Hacia dónde vamos?
- ¿Cómo sabremos cuándo hemos llegado?
- Para eso te proponemos que luego de leer este capítulo, te reúnas con tu equipo de lideres (ya sea del Grupo de Vida donde estén sirviendo, Red de Discipulado, o Ministerio), y completen el siguiente cuadro para definir los Objetivos para este año:
También como equipo podrán definir uno o dos objetivos más, que sean específicos para su Grupo de Vida, Red de Discipulado o Ministerio, que estén relacionados con nuestra Visión y Misión, y que puedan medir.
Para ayudar a hacer un seguimiento durante el año, y que como equipo de ministerio puedan hacer los ajustes necesarios, como Iglesia les facilitaremos un Panel de Control donde podrán ir comparando los resultados obtenidos con los objetivos fijados.
Una vez más recordamos que esta práctica de liderazgo de ninguna manera reemplaza la necesaria dirección de la Palabra de Dios, y la ayuda del Espíritu Santo. Pero sí será muy útil para enfocar nuestras oraciones y acciones como grupo e iglesia en los próximos meses, trabajando en sociedad con el Señor tal como lo ha establecido en Su Palabra:
“Al hombre le toca hacer planes, y al Señor dirigir sus pasos.” Proverbios 16:9 (DHH)
Esperamos que, con la ayuda del Señor, todos podamos alcanzar y superar los objetivos. Y de esa manera al finalizar el año, tengamos muchos motivos para agradecer y dar gloria a nuestro Dios, mientras reconocemos y felicitamos el esfuerzo de cada Célula, Red y Ministerio.
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