Cuando conocemos a Cristo, cuando conocemos el evangelio, la buena noticia, viene sanidad a nuestras vidas. Cristo no solo vino a salvarnos, sino también a sanarnos.
Esa sanidad interior es integral y tiene una triple dimensión. La primera es la restauración, que tiene que ver con tu pasado, y se basa en dos columnas, ser perdonados y perdonar. La segunda dimensión es la RESTITUCION, que tiene que ver con tu presente. Y la tercera dimensión es la consolidación, que tiene que ver con tu futuro.
Mas este es pueblo saqueado y pisoteado, todos ellos atrapados en cavernas y escondidos en cárceles; son puestos para despojo, y no hay quien libre; despojados, y no hay quien diga: Restituid. Isaias 42:22 RVR
LA ORDEN DE RESTITUCION
Restitución es la palabra hebrea AMAD, que se puede traducir PARAR, LEVANTAR, ESTABLECER, SEGUIR, VOLVER A COLOCAR. Es decir, Dios te vuelve a colocar en la posición que perdiste, Dios te restituye, te da lo que te fue quitado.
Podrás vivir en el presente con todo aquello que en el pasado no pudiste, con todo aquello que te fue quitado.
Los cristianos nos desalentamos en los momentos de perdida porque desconocemos esta verdad de la RESTITUCION, pero si supieras que te va a ser restituido, no solo lo que perdiste, sino que te será devuelto en mayor calidad o mayor cantidad, entonces enfrentarías las pruebas con fortaleza.
¡Vuelvan, pues, a la fortaleza, prisioneros de esperanza! En este preciso día yo les hago saber que les devolveré el doble de lo que perdieron. Zacarias 9:12 Reina Valera Contemporánea
- ¿Cuánto? El DOBLE. Dios restaura no solo lo que perdiste, sino en mayor cantidad o calidad.
- ¿Qué fue lo que le paso a Job?
Luego, cuando Job oró por sus amigos, el Señor le restituyó sus riquezas y felicidad. ¡En verdad, el Señor le dio el doble de lo que antes tenía! Job 42:10 Nueva Biblia Viva
Pero no es cuestión de cosas o de bienes, tal vez sufriste mucho en la vida, no sé, vergüenza, humillación, abandono, rechazo, confusión.
En lugar de vergüenza, recibirán doble herencia; en lugar de deshonra, se alegrarán de lo que reciban; porque en sus tierras recibirán doble honra, y gozarán de perpetua alegría. Isaías 61:7 Reina Valera Contemporánea
Dios restituye el doble de lo que perdiste o te robaron. Pero el doble es el mínimo. La ley de Dios establecía que la restitución fuese 7 veces más. Ana cantaba que cuando Dios restaura…
los hambrientos dejaron de tener hambre y hasta la estéril ha dado a luz siete hijos (1 Samuel 2:5).
- ¿Cuánto? Siete veces.
- Recuerda que Dios restituye no solo lo que perdiste, sino en mayor cantidad o calidad.
Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio, que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna. Marcos 10:29-30
Los cristianos nos desalentamos en los momentos de perdida, pero si vos sabes que te será devuelto en mayor cantidad o calidad lo que perdiste, entonces enfrentaras la prueba con una mayor fortaleza.
Como dice en 2 Crónicas 24:13, y restituyeron la casa de Dios a su antigua condición. Dice que la restitución debe ser a su antigua condición.
Quizás pasaste por un tiempo de liberación y sanidad, y Dios te restauro a través de que perdonaste, una infidelidad, un rechazo, un abuso, una humillación; pero todavía te cuesta relacionarte y confiar en otros. Tal vez el Señor restauro tu economía ayudándote a pagar tus deudas; pero hoy no logras vivir en la abundancia que el promete. ¡Necesitas RESTITUCIÓN!
¿Cómo recibir la restitución?
- Pídele a Dios restitución.
- Ponte en armonía con Dios. Ahora arrepiéntete y cambia.
- Primero restituye para poder recibir la restitución.
- Da la orden de restitución.
Así superamos el conformismo y la resignación. Abandonamos las costumbres de espiritualizar las derrotas y la victoria sobre el enemigo se hace palpable. Le ganamos en lo concreto y el triunfo de Cristo en la cruz se actualiza y se hace cotidiano. La amargura se va y el gozo de los mas que vencedores nos llena en lo profundo.
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